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Design thinking

¿Qué es el Design Thinking y por qué se ha hecho tan popular en otras disciplinas ajenas al diseño? ¿De dónde surge este enfoque?
Design thinking

El Design Thinking es una metodología muy apreciada y popular sobre todo en el mundo de los negocios. En esencia, el design thinking facilita un proceso donde la creatividad, resolución de problemas, iteraciones de feedback y el enfoque centrado en personas son protagonistas. No es más que los mismos valores que ya hemos visto en la metodología de Diseño Centrado en el Usuario pero aplicadas a otras disciplinas académicas.

Diseño centrado en el usuario
¿Cuáles son las metodologías de diseño que facilitan crear productos usables y con una buena experiencia? ¿Qué significa ‘centrarse’ en las personas? ¿Cuáles son las fases de un proceso de diseño?

Este movimiento (más que metodología) surge de la Universidad de Stanford, pero al contrario de lo que mucha gente piensa, no es David Kelley quien lo propuso por primera vez en IDEO, sino que fue un grupo de ingenieros en 1972 y 1974 quienes hablaron por primera vez del visual thinking como concepto necesario para desarrollar soluciones creativas.

Pensemos que cuando este movimiento se hizo popular lo hace en una cultura donde las oficinas están distribuidas en cubículos y pocas veces existe colaboración natural entre personas que trabajan juntas. El design thinking llegó como una promesa de colaboración radical y de facilitar el intercambio de ideas e información entre equipos de ingeniería y diseño de forma fluida, usando un lenguaje creativo.

La propuesta se puede resumir en los siguientes puntos:

  • Centrarse en valores humanistas.
  • Show, don’t tell (Demostrar en lugar de contar).
  • Buscar soluciones sencillas.
  • Experimentar y experimentar como base del desarrollo.
  • Ser conscientes del proceso.
  • Colaboración entre equipos.
  • Toma de decisiones informada.

Sin embargo, pronto se vieron los riesgos de este enfoque, ya que se centra mucho más en la ideación que en la implementación. La excitación sobre la generación de un muro lleno de post-its en sesiones divertidas y creativas de ideación raras veces concluía con soluciones de ningún tipo.

Esto, lejos de desanimarnos y denostar los procesos creativos nos debe hacer conscientes de que las metodologías de trabajo deben facilitar tanto el thinking como el making. Ya que el uno sin el otro se quedarán vacíos.

El diseño es exploratorio pero sugestivo, es creativo pero declarativo, y es especulativo pero también propositivo.

Hay muchas maneras de llegar del punto A al punto B.

Por lo tanto, acercándonos a las metodologías de diseño podremos entender las necesidades de iteración, la no linealidad en la búsqueda de soluciones y la necesidad de la colaboración de todos los roles participantes para llegar con éxito del punto A al punto B por cualquiera que sea el camino que tracemos.